jueves, 5 de mayo de 2011

TEMA: LAS METAS Y TUS SUEÑOS

ACTIVIDAD:
1. LEE DETENIDAMENTE LA LECTURA "Cómo lograr el éxito en la vida", COPIA CADA PASO Y RESPONDE EN TU CUADERNO, RECUERDA QUE ES PERSONAL.
2.REALIZA LA LECTURA "¿Qué sucede si tus sueños
...se quedan en sueños?",
LUEGO REALIZA EN TU CUADERNO UNA REFLEXION SOBRE LA MISMA.

Cómo lograr el éxito en la vida
Ponernos metas en la vida y estar continuamente esforzándonos para alcanzarlas lleva consigo el éxito. Si tenemos claro lo que deseamos y ponemos todos los medios para lograrlo seguro que lo conseguiremos. De nosotros depende.

1. ¿En qué consiste el éxito?
2. Establecer los objetivos
3. Cómo podemos alcanzar el éxito
4. El éxito en el trabajo


1. ¿En qué consiste el éxito?

Lograr el éxito. Hay que fijarse una meta y realizar todo el esfuerzo para lograrla.


Para conseguir el éxito en la vida es necesario tener claro qué es lo que deseamos, fijarnos metas y objetivos tanto desde un punto de vista profesional, como desde el social o familiar, y hacer todo lo posible por conseguirlo. El éxito es conseguir lo que se desea.

Piensa en lo que te gusta hacer y a lo que te gustaría dedicarte y realiza todo el esfuerzo que sea necesario para lograrlo. Tener éxito significa no detenerse nunca y estar continuamente preparándose.

Recuerda que aunque sepas mucho de un tema en cuestión, siempre podrás mejorar. Las personas que han alcanzado el éxito no lo han logrado simplemente por un golpe de suerte o por azar. Antes, han tenido una vida de trabajo y preparación, y cuando se han presentado las oportunidades, han sabido verlas y aprovecharlas.





2. Establecer los objetivos


Es importante definir objetivos claros, específicos y alcanzables, teniendo en cuenta las posibilidades y cualidades de cada uno y conociendo nuestras limitaciones. No podemos fijarnos objetivos para los que no tengamos aptitudes. No podemos, por ejemplo, aspirar a ser un gran cantante y no tener buena voz. Tenemos que ajustar nuestros deseos a nuestras posibilidades.

Una vez que nos hayamos fijado un objetivo en el que no se requieran unas cualidades específicas de las que no disponemos, tendremos que esforzarnos continuamente para lograr mediante el esfuerzo y la voluntad nuestra meta.

Una gran meta requiere tiempo y dedicación. Para lograrlo habrá que superar muchos obstáculos, algunos internos o personales como la falta de confianza en uno mismo, la voluntad o el desánimo, y otros externos o ambientales como la competencia o los medios para lograrlo.

Superar los obstáculos y nuestros puntos débiles es fundamental para lograr nuestros sueños.





3. Cómo podemos alcanzar el éxito


Pretender alcanzar el éxito en la vida es un camino arduo y difícil, pero si realmente lo deseamos, podremos conseguirlo. Veamos a continuación algunas sugerencias para lograrlo:

- Diseñar un plan. Antes de empezar cualquier proyecto, hay que idear y preparar un plan de lo que nos gustaría hacer. Diseñar una estrategia y empezar a trabajar para lograrlo con éxito. Para ello es fundamental planificar el tiempo y organizarse. Todo proyecto debe estar bien estructurado, de lo contrario no obtendríamos buenos resultados.

- Dificultades. El camino hacia el éxito no está exento de problemas ni dificultades. Si realmente deseas alcanzarlo, debes saber enfrentarte a los problemas. Piensa que todo problema tiene una solución y que de tu actitud y manera de actuar dependerá superarlos. Además, pueden servir de estímulos y hacer que nos crezcamos ante ellos.

- Tener ambición. Sin ambición, no se consigue nada. Para salir de donde estás y prosperar, es necesario tener ambiciones. Las personas ambiciosas llegan a más en la vida y logran sus objetivos con éxito, conforme van logrando sus metas van sustituyéndolas por otras cada vez más importante.

- Metas realistas. Al planificar nuestras metas debemos ser realistas y fijarnos unos objetivos diarios que podamos cumplir, evitando hacer planes que seamos incapaces de realizar. Debemos ordenar las tareas y calcular bien el tiempo que necesitamos para cada una de ellas y poner todo nuestro esfuerzo para realizarlas con el objetivo puesto en el éxito futuro.



4. El éxito en el trabajo


Un buen trabajador tiene que estar comprometido con su trabajo y dedicarse a él con responsabilidad y esfuerzo. Hay que fijarse unos objetivos a nivel profesional, buscando no sólo los beneficios personales sino también los de la empresa u organización.

Para responder con eficacia a las necesidades de la empresa debemos estar cualificados para desempeñar las funciones que nos piden y estar continuamente preparándonos y actualizándonos, de lo contrario nuestros conocimientos dejarían de ser útiles.

Una característica fundamental de las personas que logran el éxito profesional es que suelen disfrutar con lo que hacen. Son personas entregadas a su trabajo, que les gusta lo que hacen y piensan que su esfuerzo y trabajo será valorado. Realizarlo con responsabilidad y entrega les ayudará a conseguir sus metas y por tanto a lograr lo que ellos desean, el éxito en el trabajo.







Dª. Trinidad Aparicio Pérez
Psicóloga. Especialista en infancia y adolescencia.

Granada.

¿Qué sucede si tus sueños... se quedan en sueños?


Todos tenemos desde pequeños sueños que queremos realizar. Todos tenemos algo que nos gustaría hacer, ser o tener algún día. Sin embargo, no hacemos lo que ese sueño requiere de nosotros para que se convierta en realidad. La mayoría de las veces es la flojera, otras es la falta de tiempo, lo que te lleva a una mala organización del mismo, otras más, por falta de definición y concentración en la meta, y añadiría también que por la comodidad y también aquello de “lo quiero pero ya”.

Cuando decimos que nos gustaría hacer, ser o tener algo en la vida, no lo tomamos en serio, no nos tomamos en serio a nosotros mismos. Es un deseo que muchas veces queda en el aire. Para que un sueño deje de llamarse sueño y se convierta en una meta que deseas alcanzar, es necesario escribirlo en un papel, definirlo, pasarlo a la realidad, ubicando todas las cosas terrenales que tienen que suceder para que tu logres ese propósito.

Lo que muchas veces sucede es que después de analizarlo, nos da flojera el esfuerzo que tenemos que hacer para lograr lo que deseamos. Analizamos lo que tenemos que sacrificar muchas veces para lograr algo y claudicamos aún antes de empezar, porque es mucho más cómodo quedarnos donde estamos, lo cual no requiere de ningún esfuerzo especial.

Si te sucede esto, hay algo que no has comprendido y que te conviene que lo memorices, que te pongas letreritos por todas partes donde pases, para que lo asimiles profundamente:

"Todo lo que desees en la vida, requiere de esfuerzo, de tiempo y de trabajo"

¡Nada es gratis! Todas las personas de éxito han tenido que pasar por esto. Todas han tenido que esforzarse, que sacrificar tiempo, que trabajar para llegar a donde están. Cuando ves a una persona que ha tenido éxito en algo, es muy fácil decir “qué suerte ha tenido” y no ha sido suerte, ha sido su trabajo, su dedicación y su constancia en ello a pesar de todos los obstáculos, lo que lo llevó a tener ese éxito, que muchos minimizan acreditándoselo a la suerte y no a él mismo.

¿Qué sucede si los sueños se quedan en sueños?

Cuando vas arrastrando por la vida sueños de cosas que deseas ser, hacer o tener, y no haces nada para conseguirlo, te crearán sentimientos de frustración, con lo cual empeorarás tus relaciones con los demás y contigo mismo. Toda la vida, estarás escuchando esa “vocecita” interna, reclamarte lo que quiere y que tú no le has dado.

Cada sueño que no tomes en serio para llevarlo a cabo, te creará obstáculos en el camino para tu desarrollo personal y profesional. Cada sueño convertido en una meta y llevado a la realidad, te dará satisfacciones, seguridad y motivación para lograr aún más.

Muchos hemos escuchado hablar de “El Secreto”, y muchos habrán visto el video, es muy fácil y cómodo decirle lo que deseas al Universo y esperar a que te lo traiga y en caso de que no te llegue, reclamar. La realidad es que para que el Universo comprenda tu mensaje, tu tienes que hacer la labor de definir muy bien lo que deseas como si estuvieras haciendo un pedido por catálogo, organizar las acciones que son necesarias para lograr ese objetivo y atenderlas en orden anotándolas en la agenda. Es entonces que el Universo, tendrá claro tu deseo y es cuando comenzarás a experimentar “casualidades” de cosas y personas en tu camino, que necesitas para conseguir lo que te propones, sin ninguna explicación lógica, más que el Universo está trabajando contigo. Así que,

¿Deseas convertir tus sueños en realidades?

Haz una lista de ellos y al anotarlos los convertirás en metas y estas las debes de convertir en acciones. Sólo así dejarán de ser sueños. Decide cuál deseas primero, defínelo, organiza las acciones y ¡anótalo en tu agenda! Mientras no estén las acciones en tu agenda, no estarás trabajando en ello. ¡Actúa! Trabaja en tus metas todos los días…
Organízate y sé feliz
Maca


Maca Hernandez
OrganízateYa!
México D: F.

jueves, 28 de abril de 2011

LECTURAS PARA REFLEXIONAR

LEE DETENIDAMENTE, AL FINALIZAR EN TU CUADERNO, RESPONDE: ¿CUÁL ES EL MENSAJE QUE TE HA DEJADO ESTA LECTURA?

El portero del Hotel

No había peor oficio en el pueblo que ser “el portero del Hotel”

Pero ¿qué otra cosa podría hacer aquel hombre? De hecho, nunca había aprendido a leer ni a escribir,

no tenía ninguna otra habilidad ni conocía otro oficio.

Un día, se hizo cargo del Hotel un joven negociante con muchas inquietudes, muy creativo y emprendedor y decidió modernizar el negocio.

Hizo cambios y citó a todo el personal para dar las nuevas instrucciones de su reglamento.

Al portero, le dijo: A partir de hoy, usted, además de estar en la puerta, va a preparar un informe semanal donde registrará la cantidad de personas que entran y además anotará sus comentarios y recomendaciones sobre el servicio."


* " Me encantaría complacerlo, señor, pero no se leer ni escribir."
* Le dijo el portero.

- "¿Cómo?... cuánto lo siento, pero indiscutiblemente tendré que prescindir de sus servicios, pues así no me es de utilidad".

- "Pero señor, usted no me puede despedir, ¡yo he trabajado en esto toda mi vida!..."

- "Mire, yo comprendo y lo siento mucho, pero no puedo hacer nada por usted, le vamos a dar una indemnización y espero que le baste hasta que encuentre otro trabajo u oficio. De veras que lo lamento y que tenga buena suerte". Sin más, se dio vuelta y se fue. El portero sintió que el mundo se le venía encima. ¿Qué voy hacer, Dios mío?...


Recordó que en el Hotel, cuando se rompía una silla o se arruinaba una mesa, el lograba hacer un arreglo sencillo y provisional.

Pensó que esta podría ser una ocupación transitoria hasta conseguir un empleo, pero solo contaba con unos clavos oxidados y una tenaza arruinada.

Entonces pensó que usaría parte del dinero de la indemnización para comprar una caja de herramientas completa.


Como en el pueblo no había ninguna ferretería, tenía que viajar dos días en mula para ir al pueblo mas cercano a realizar la compra. Ensilló el animal y emprendió el viaje.


Habiendo regresado ya a casa, cierto día un vecino llamó a su puerta:

“-¡Hola vecino!, vengo a ver si tiene un martillo que me pueda prestar".

* " Si, tengo uno, lo acabo de comprar pero lo necesito para trabajar- "


Entiendo, pero yo se lo devolvería mañana temprano". "¡Esta bien! A la mañana siguiente, como había prometido, el vecino tocó la puerta.

“-Mire amigo, yo todavía necesito el martillo. ¿Por qué no me lo vende-?”

“-¡No puedo!, lo necesito para trabajar y además la ferretería está a dos días de camino-”

“-Hagamos un trato - dijo el vecino- Yo le pagaré los días de ida y vuelta mas el precio del martillo, total usted está sin trabajar. ¿Qué le parece-?"


Realmente, esto le daba trabajo por cuatro días y aceptó. Volvió a montar su mula y a su regreso, otro vecino lo esperaba en la puerta de su casa.

“-¡Hola, vecino! Usted le vendió un martillo a mi amigo, vengo a decirle que yo necesito unas herramientas y estoy dispuesto a pagarle sus cuatro días de viaje, mas una pequeña ganancia... mire, no dispongo de tiempo para el viaje.-”

El ex-portero abrió su caja de herramientas y su vecino eligió una pinza, un destornillador, un martillo y un cincel. Le pagó y se fue.

Mientras iba por el camino recordaba las palabras de su vecino:

“-No dispongo de cuatro días para ir a comprar las herramientas.-”

Si esto era cierto, mucha gente podría necesitar que él viajara para traer herramientas.

En el viaje siguiente, arriesgó un poco mas de dinero trayendo más herramientas de las que había vendido. De paso, podría ahorrar algún tiempo en viajes. La voz empezó a divulgarse por el pueblo y muchos quisieron evitarse el viaje.

Una vez por semana, el ahora corredor de herramientas viajaba y compraba lo que necesitaban sus clientes.

Con el tiempo alquiló un galpón para almacenar las herramientas y algunas semanas después, adaptó una vidriera y el galpón se transformó en la primera ferretería del pueblo.

Todos estaban contentos y compraban en su negocio.

Ya no viajaba, los fabricantes le enviaban sus pedidos, el era un buen cliente. Con el tiempo, las comunidades cercanas preferían comprar en su ferretería y ganarse los días de camino.

Un día, se le ocurrió que su amigo el tornero, podría fabricarle las cabezas de los martillos.

Y luego, ¿por qué no?, las tenazas... las pinzas... los cinceles... y luego fueron los clavos y los tornillos...

En diez años, aquel hombre se transformó en millonario con su trabajo como fabricante de herramientas.

Un día decidió donar una escuela a su pueblo. En ella, además de leer y escribir, se enseñarían las artes y oficios mas prácticos del momento.

En el acto de inauguración de la escuela, el alcalde le entregó las llaves de la ciudad, hizo que cortara la cinta, lo abrazó y le dijo:

“-Es un gran orgullo para nosotros agradecerle por este gesto tan meritorio para nuestra comunidad el que usted nos haya donado esta escuela; le pedimos nos conceda el honor de poner su firma en la primera hoja del libro de actas.-”

“-El honor sería para mi.-” dijo el hombre.

“-Nada me gustaría más que firmar allí, pero no se leer ni escribir; soy totalmente analfabeto.-”

“-¿Usted iletrado?...-” dijo el Alcalde que no alcanzaba a creerlo.

“-¿Usted construyó un imperio industrial sin saber leer ni escribir? ¡Estoy realmente asombrado!" “Me pregunto, ¿qué hubiera sido de usted si hubiera sabido leer y escribir?-”

“-Yo se lo puedo contestar-” respondió el hombre con calma.

“-Si yo hubiera sabido leer y escribir... ¡sería el portero del Hotel!-”



* Generalmente los cambios son vistos como adversidades, pero las adversidades siempre encierran bendiciones.


* Las crisis están llenas de oportunidades.


* Todo cambio pasa para nuestro bien y lo que consideramos una desgracia hoy, puede ser la gran oportunidad que transformará nuestra vida para siempre.